El camino de la derrota

La relación del hincha con su equipo de fútbol viene marcada por el contexto en el que ambos se conocieron. No es lo mismo despertar una pasión en tiempos de bonanza que hacerlo en época de vacas flacas —otra cosa es decidir cuál de las dos opciones hace el camino más divertido—. La selección española, por ejemplo. La imagen que tienen de ella los nacidos en los años setenta difiere bastante de la que proyecta sobre los que debutaron en los noventa o a principios de siglo. Los primeros alcanzaron la gloria después de encarrilar numerosas decepciones bianuales. Los segundos, con un Mundial y dos Eurocopas en los inicios de su existencia, debieron de pensar que todo el césped era orégano. Y no.

La relación de cuatro amigos unidos por los Mundiales de fútbol es la estructura central de Eliminados (Alianza de Novelas), una novela escrita por Fernando Costilla. Javi, Rocío, Charli y Toño llevan juntándose desde 1978, cuando aún estaban en el colegio, para ver la cita deportiva. El libro retrata a una generación que esperó casi cuatro décadas para ver un éxito de su selección. Pero habla, en realidad, de muchas otras cosas. De la amistad, del amor, de música o de cine. Y también de cómo evolucionan las personas y de las diferentes maneras de aceptar la madurez y el paso del tiempo. De derrota en derrota —quizá con alguna victoria entre medias— hasta el pitido final que elimina todo.

Y de que la vida es, más o menos, todo lo que transcurre entre los años en los que aún se sueña con llegar a jugar en el equipo de tus amores y el día en que te das cuenta de que los futbolistas que visten esa camiseta podrían ser tus hijos y, en breve, tus nietos. Entonces, al menos, quedará la posibilidad de hacer balance sobre lo divertido que ha sido el camino.

FUENTE: EL PAÍS