Ideas para escribir un libro
Actualmente, internet ofrece una vasta cantidad de información relacionada con ideas para escribir un libro. En este sentido, el primer aspecto en torno al cual el escritor debe reflexionar es sobre sus propias motivaciones y/o intenciones. La razón es simple: la escritura sirve reflejar la posición del autor con respecto a un sentimiento interior o colectivo, así como una forma de difusión de información.
¿Cuál es la fuente de inspiración? ¿Cuál es el propósito: entretener, informar, revelar un mundo imaginario, expresar un punto de vista…? Inclusive, el estímulo comercial también puede ser un móvil muy válido al momento de elaborar un libro. En cualquier caso, cuando el escritor ha develado esas incógnitas, puede cumplir las etapas necesarias.
Definir la intención
Cuando el escritor ha sopesado su propósito —generalmente— le resulta más sencillo transmitir su mensaje. Al mismo tiempo, la motivación del autor sirve de guía para elegir un género o un estilo determinado. Ahora bien, un libro no necesariamente tiene que ser encasillado dentro de un solo género literario.
Por ejemplo: una novela puede ser de ciencia ficción y, simultáneamente, presentar una narrativa propia de tramas detectivescas o de misterio. Aunque, una recomendación importante es respetar las particularidades de cada género literario. Por lo tanto, al combinar varios géneros y/o estilos es indispensable que no sean excluyentes entre sí, para no generar contradicciones o incoherencias.
Recomendaciones para escribir un libro de no ficción
La narrativa de no ficción obligatoriamente implica un basamento en cuestiones verídicas. Dicha premisa abarca a los hechos, los detalles, las incidencias y los personajes. En consecuencia, si un autor coloca una descripción —así parezca insignificante— que él conoce como falsa, puede interpretarse como un acto deshonesto.
Por lo tanto, este género se fundamenta en toda la literatura creada con fines de difusión de conocimiento. Es decir, textos científicos, contenidos académicos, manuales, ensayos históricos y escritos técnicos. En donde las fuentes citadas deben ser comprobables y la información puede ser replicada.
¿Qué es la semi-ficción?
Cuando un escritor aplica pequeños cambios a los sucesos históricos o a un hecho científico, el texto indefectiblemente ya no pertenece a la no ficción. Si bien estas ligeras modificaciones son aceptables, significan una alteración —así como una enorme falta ética— tratar el contenido como si fuese fidedigno. En este punto, lo correcto es afirmar que se trata de un texto de semi-ficción.
Recomendaciones para escribir un libro de poesía o un poemario
Identificar un estilo
La poesía clásica es típicamente definida como aquella elaborada en estrofas, regida por parámetros métricos y con una rima específica. Por consiguiente, son poemas con un número preciso de sílabas, dotados de armonía y musicalidad. Sin embargo, es posible escribir poesía en prosa o combinar ambos estilos (lo cual, es un rasgo característico de muchos poetas vanguardistas).
Entonces, para un escritor —especialmente si está iniciándose en la poética— resulta bastante útil familiarizarse con esas variantes de estilo. De esta manera puede elegir cuál forma de composición se adapta mejor al sentimiento o idea que desea expresar. Igualmente, la elección del estilo forma parte de un proceso creativo integral, por ende, no necesariamente debe ser el primer paso.
Leer, internalizar
La lectura de poemas permite conocer el pensamiento y los recursos empleados por otros poetas. Claro, lo más aconsejable es realizar una lectura profunda, reflexiva, sentida, “masticando” cada frase. Al tratarse de sentimientos, la poesía siempre será una composición subjetiva, pero los sentimientos (amor, dolor, nostalgia, deseo…) son universales.
En esta instancia, surge una incógnita ineludible, ¿cómo diferenciarse de los demás poetas si el propósito es plasmar sentimientos similares? ¿Cómo alcanzar la autenticidad? Las respuestas necesariamente van relacionadas con la constancia y la creatividad. En otras palabras, es un proceso de escribir y reescribir con la meta de depurar las frases.
Entender el uso de los recursos
En la composición poética la creatividad por sí sola suele ser insulsa si el escritor no utiliza de forma oportuna los recursos expresivos. Puesto que las metáforas, las anáforas y las aliteraciones pueden alterar o acentuar de forma muy significativa la idea de una frase. A través de ellos, el poeta adquiere la capacidad de transformar su inspiración en una expresión ornamentada.
Por ello —es importante insistir al respecto— para los poetas resulta imprescindible la lectura de los grandes maestros de la poesía. De este modo, figuras históricas y con estilos tan distintos como Shakespeare y Rafael Cadenas, por ejemplo, se convierten en los mejores maestros.
Diseñar un poemario
Hoy en día, resulta bastante sencillo conseguir diseños de poemarios en internet. ¿Por qué es importante este paso? Bueno, la organización de los poemas en un poemario permite presentarlos con un orden coherente de acuerdo con la intención del autor. Por esta razón, el poeta debe determinar si va a colocar o no aspectos como:
- Título. Preferiblemente, el encabezado debe ser atractivo y acorde con el contenido del poemario. Después de todo, es el nombre por el cual otras personas conocerán la obra.
- Índice.
- Subtítulos (nombre de cada poema) y/o poemas numerados. Del mismo modo, el poemario puede ir dividido en secciones que agrupan varios poemas.
- Estética (número de columnas por página y el espacio entre las estrofas).
Recomendaciones para escribir un libro de fantasía
La fantasía se ha posicionado como el género literario más popular de la época contemporánea. A su vez, la fantasía comprende al menos 10 subgéneros más, cada uno con sus características particulares. Por supuesto, la noción fundamental en todos ellos es la factibilidad de —literalmente— cualquier cosa imaginada por el autor.
En concordancia, la ausencia de límites creativos abre un universo de mundos inmateriales, criaturas mitológicas, seres fantásticos, monstruos, hadas, elfos, extraterrestres, entes inter-dimensionales… Pero, la cualidad “ilimitada” de la fantasía también requiere un orden argumentativo y, sobretodo, emplear los recursos literarios con el fin de crear descripciones vívidas.
Pasos
- Hacer una lluvia de ideas.
- Investigar sobre los subgéneros de fantasía y los recursos empleados por los grandes autores para plasmar en el papel el mundo que tienen en su mente.
- Elaborar descripciones detalladas de los personajes principales y secundarios (sin considerar si estas descripciones serán reflejadas en el texto del libro). Esto incluye sus respectivas historias de vida, rasgos de personalidad, vestimenta, motivaciones y expectativas.
- Crear un marco de tiempo para evitar incoherencias.
- Detallar cada aspecto del mundo imaginario a construir (sociedad, política, flora, fauna, atmósfera, geografía, astronomía)…