Imponentes medidas sanitarias en la inauguración de la Mostra de Venecia

El coronavirus no pudo con el festival de cine más antiguo del mundo. Con imponentes medidas sanitarias, se abre la 77ª edición de la Mostra del cine de Venecia. Es el primer gran festival internacional que se celebra con la presencia de público, con las debidas precauciones: distancia de seguridad, mascarilla y reserva anticipada del puesto en las salas de proyección. Se medirá siempre la temperatura corporal de los acreditados y del público, y no se permitirá el ingreso a quienes superen los 37,5 grados. Símbolo del profundo cambio que impone el Covid es el muro de dos metros de altura que se ha levantado ante el Palacio del Cine en el Lido, para separar la alfombra roja del público. No habrá aglomeración ante la pasarela, ni fans asediando a sus estrellas a la caza de un autógrafo o un selfi.

El director del Festival, Alberto Barbera, confía en que este importante acontecimiento cultural sirva para lanzar un mensaje de esperanza al mundo: «Esperamos que la Mostra sea la demostración de que, siguiendo los protocolos sanitarios, es posible repartir». En señal de colaboración y solidaridad en este momento de dificultad global, acompañarán esta noche a Alberto Barbera otros siete directores artísticos de los principales festivales de cine europeos, desde Cannes a Berlín, pasando por San Sebastián, en la inauguración oficial del Festival el Palazzo del Cinema del Lido. Se leerá un documento conjunto para reafirmar el valor irrenunciable del cine y la importancia cultural de los festivales.

Pasarela sin fans

Los invitados internacionales serán pocos. Los que procedan de países fuera del área Schengen deberán someterse a reglas más estrictas. La Mostra exige el certificado de un test realizado antes de salir de su país de residencia, otro a su llegada a Venecia y un tercero si permanece en Italia durante más de cinco días. El protocolo se aplica a jurados, actores, directores y a todos los componentes de las producciones cinematográficas. En consecuencia, en la alfombra roja apenas habrá glamour ni divos de Hollywood que daban lustre a la Mostra. Los jurados sí incluyen estrellas internacionales, comenzando por la actriz australiana Cate Blanchett, con dos Óscar y tres Globos de Oro. Presidirá el jurado que el 12 de septiembre asignará el León de Oro a la mejor película y los demás premios de la sección oficial.

Por obvias razones, entre ellas las dificultades para la organización del festival a consecuencia de la pandemia, se dará gran visibilidad al cine italiano, con 4 películas aspirantes al León de Oro entre un total de 18, además de una veintena de films repartidos en diferentes secciones. Otra película italiana, «Lacci», de Daniele Luchetti, una historia de infidelidad de una pareja napolitana, abrirá fuera de concurso el festival. Con el León de Oro a la carrera serán premiadas la actriz británica Tilda Swinton y la directora Ann Hui de Hong Kong. En definitiva, las mujeres tendrán gran protagonista en esta Mostra. Aparte de los nombres citados, hay 8 directoras entre las 18 películas a concurso, algo sin precedentes en Venecia.